Boletín de novedades educativas N° 83. Entrevista a Mariano Narodowski: Escenarios futuros de la educación y el formato escolar. El proyecto Pansophia.
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En esta oportunidad entrevistamos a Mariano Narodowski para indagar sobre el proyecto Pansophia del que forma parte. La entrevista nos llevará no solo por los fundamentos y el sentido de ese proyecto, sino también por algunos posibles escenarios futuros de las maneras de enseñar y aprender producto de investigaciones en el campo de la tecnología y de la bio – tecnología. También recorreremos algunas breves revisiones de propuestas que en el pasado modificaron el formato escolar y nos permiten comprender el presente. Las siguientes páginas presentan varias claves para pensar la educación, la escuela como tecnología, las evaluaciones estandarizadas y el rol de los actores supranacionales en el rumbo educativo global.
Mariano Narodowski es Doctor en educación en Universidad Estatal de Campinas, Brasil. Es profesor full time de la Escuela de Gobierno de la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT). Ha publicado artículos de investigación en Journal of Education Policy, Compare, Comparative Education entre otros y es autor de 20 libros. Fue Ministro de Educación de la Ciudad de Buenos Aires. Además, Mariano ha sido Profesor Visitante de varias universidades del mundo y ha recibido premios y subsidios a la investigación como el John Simon Guggenheim Fellow el Oustanding Scholar Award (LASIG-CIES). Es miembro fundador de Pansophia Project.
-FL:- ¿En qué consiste el proyecto «Pansophia»? ¿Qué hicieron, qué es lo que van a hacer y cuál es el sentido de ese proyecto?
-MN:- El proyecto Pansophia o Pansophia Project es un proyecto global de un conjunto de colegas, que se está comenzando a organizar y difundir desde el año 2016. Trata sobre los futuros posibles de la educación y cómo pensar y transformar el presente en clave futura. El equipo está integrado por un grupo de educadores, politólogos, especialistas en medios audiovisuales, etc. La mayoría de ellos muy jóvenes.
Somos muy respetuosos del estudio histórico de la escuela entendida como un fenómeno acotado en la historia de la humanidad, que tiene máximo 300 años de existencia, dependiendo del lugar, y que por lo tanto es un fenómeno contingente que podría cambiar, mutar a otra cosa y continuar de otra manera.
Nuestro trabajo se realiza en base a evidencias, datos y situaciones que recolectamos y relevamos en la actualidad, como así también al estudio riguroso de la perspectiva científica para tratar de proyectar cuáles son los destinos que podría llegar a tener la educación en los próximos años, e inclusive la propia escolarización.
-FL:- ¿El proyecto se replica en otros lugares del mundo?
-MN:- Sí, ya estamos en contacto con colegas de otros lugares países organizando los nodos de Pansophia.
Pansophia es el pensamiento moderno de la educación, el ideal pansófico fue propuesto por Jan Amos Comeniius en 1657 y es la idea de enseñar todo a todos. Como nuestra postura es un poco más abierta la idea es: todo el saber humano es para todos los seres humanos. La pregunta es ¿cómo hacemos para garantizar la pansophia a pesar de los posibles cambios que pueda sufrir la escolarización? Para explorar las respuestas posibles generamos escenarios, algunos son muy parecidos a la actualidad, otros son muy disruptivos.
Por ejemplo, estamos siguiendo muy de cerca la investigación que se está haciendo sobre la producción e injerto de nanobots en la neo corteza cerebral con el objetivo de generar una interfaz para acceder directamente a la nube. Eso es algo que está desarrollando ahora y que nos interesa mucho porque en caso de aplicarse tendría enormes consecuencias del punto de vista educacional. También estamos analizando los cambios en el mecanismo, para decirlo básicamente, de cortado y pegado de células y de pedazos de ADN en la producción de mutaciones de áreas neuronales completas, lo cual también podría generar un cambio absoluto en el ámbito educativo. Otra línea son los experimentos como el proyecto COOL de Nueva Zelanda que propone la posibilidad de que las familias dejen de lado la educación analógica y que toda la educación sea online: por primera vez un Estado propone y financia una educación obligatoria no escolar (video explicativo del proyecto aquí)
Hay distintos escenarios, algunos que parecen se parecen a la serie Black Mirror pero es importante analizarlos no solamente para establecer una perspectiva de futuro, sino porque entendiendo el futuro también se entiende el presente. Es muy difícil comprender la situación en la que estamos si no entendemos los caminos posibles que podría llegar a transitar esa situación en sí.
-FL:- ¿Cómo ves la relación de esos escenarios posibles con nuestro contexto, por ejemplo basándote desde tu experiencia en la gestión? porque estás hablando de situaciones casi de la serie Black Mirror, pero que son una realidad concreta en cuanto a que se están investigando como un futuro posible, pero si nos situamos en un aquí y ahora al mirar alrededor los contrastes y distancias parecen muy grandes.
-MN:- Un escenario que estamos analizando es la posibilidad, que cada vez es más cercana en países poco desarrollados, de que el sistema escolar tradicional que conocemos tienda a ser más degradado y atienda básicamente a la población más pobre, más vulnerable, y que los sectores medios y altos migren a formas híbridas o anfibias de escolarización. Cosa que de hecho ya está pasando, porque el contacto con la tecnología, con las pantallas y con las redes de los sectores medios y altos tiene un nivel de capacidad productiva mucho mayor que el de los sectores más bajos.
-FL:-Te hago un paréntesis. ¿Vos crees que un punto inicial de ese comienzo de pasaje de un tipo de educación a otra está dado por el acceso a la conectividad, por ejemplo? Lo menciono como un factor concreto en la diferencia entre escuelas.
-MN:- Nosotros somos críticos del uso un poco trillado y aburrido que se hace en nuestro medio de la palabra innovación, ya que se utiliza para todo. Somos críticos porque las escuelas son todo el tiempo más parecidas a sí mismas. No hay grandes diferencias entre el formato de las mejores escuelas de Holanda y Finlandia con las de Uruguay o Ghana, ya que los dispositivos que las hacen funcionar son básicamente los mismos y están establecidos por la pedagogía del siglo XVII. Por supuesto que en algunos lugares funciona mejor que en otros, en algunos funciona muy bien y en otros no. Pero lo que está severamente cuestionada a es la idea de instrucción simultánea, de sistema educativo, de alianza escuela-familia, de que la escuela resuelve el problema biopolítico de dónde ubicar a los niños y adolescentes Es decir, en ese sentido las escuelas siguen cumpliendo una función bastante estable y parecida entre sí. Por este motivo nos interesa el concepto de disrupción, si es que acaso efectivamente hay algunos elementos que van a cambiar la tecnología escolar.
La escuela es en sí misma una tecnología del siglo XVII: una tecnología muy poderosa, a punto tal que nosotros vivimos y dependemos de ella, pero también como toda tecnología puede mutar a otras situaciones. En la historia de la escolarización hubo un solo momento de disrupción que fue la introducción del método lancasteriano a principios del siglo XIX. Lo que introdujo fue el sistema de enseñanza mutua tanto en Europa como en las Américas. En Argentina fue muy importante, porque fue el momento en que se cambió el dispositivo de instrucción simultánea y sistémica por otro mecanismo: el de la enseñanza mutua. Esa fue la única vez que hubo una disrupción muy importante. Treinta o cuarenta años después se volvió al sistema tradicional que hoy pervive.
-FL:- ¿Por qué causa se decidió volver al sistema tradicional?
-MN:- Hay muchas hipótesis y estudios. La hipótesis más consistente es que el método de enseñanza mutua era mucho más eficaz y más eficiente, ya que conseguía en 2 ó 3 años lo que la escuela tradicional conseguía en 8 ó 9 años. Pero muchos políticos y educadores de mediados del siglo XIX planteaban que era un método subversivo que generaba mucha sublevación entre los alumnos, ya que producía alumnos muy desobedientes, que sabían más, pero eran más indisciplinados. Por esos motivos se volvió a la vieja idea de la instrucción simultánea que es la que tenemos en la actualidad tanto en Finlandia como en Ecuador o en Kenia.
De lo que estamos hablando es de grandes líneas de tiempo que nos exceden infinitamente y lo que hay que ver es qué es lo que va a pasar con cada segmento del sistema escolar en términos de escenarios futuros, por eso una posibilidad es una escuela degradada, la misma instrucción simultánea pero aún más degradada.
-FL:- ¿Te referís a la escuela pública?
-MN:- En este sentido no interesa si es pública o privada, tal vez en otro contexto sí. Lo que importa es si esas desigualdades se van a profundizar en términos de la propia tecnología educativa, es decir, si la escuela como tecnología va a seguir usándose para unos y no para otros. Por eso el concepto de tecnología lo aplicamos a la propia escolaridad. La escuela es una tecnología.
-FL:- Por eso se habla de dispositivos escolares.
-MN:- Dispositivos que forman parte de una tecnología. Eso es un conjunto conceptual foucaultiano a partir del cual entendemos la historicidad de lo propiamente escolar, lo que también nos permite entender que a veces pretendemos cambiar muchas cosas y nos creemos muy innovadores, pero la tecnología escolar sigue siendo la misma. Lo cual no está mal, pero es necesario entender los límites del presente. Estudiando las prospectivas podemos entender en qué mundo vivimos ahora.
-FL:- ¿Las posibilidades de los tipos de disrupciones en el sistema educativo no estarían muy condicionadas por las idiosincrasias culturales, incluso dentro de un mismo país? Cuando entrevistamos a Gonzalo Frasca, nos contaba sobre una experiencia que está desarrollando con una empresa de videojuegos educativos. La experiencia se desarrolla en Noruega y en Francia. Allí implementan una serie actividades y propuestas formativas en torno a las matemáticas para de esa manera relevar cómo aprenden los chicos y qué métodos funcionan para retroalimentar el diseño de un videojuego educativo. Al respecto nos comentaba las diferencias culturales que había entre ambos países en la organización en la educación y los contrastes en la forma de la enseñanza.
-MN:- Sin ningún duda. Yo soy profesor de la Universidad Di Tella de una materia que se llama Sistemas Educativos Comparados y esas diferencias están presentes todo el tiempo, pero lo más importante del punto de vista que estamos hablando no son las diferencias, sino las semejanzas. Es decir, las cuestiones sociales, culturales, económicas, pueden variar yde hecho varían de país en país, pero la tecnología y sus dispositivos son estables desde hace siglos. Nuestra pregunta pansophiana es ¿Hasta cuándo? Con esto no estamos abriendo un juicio de valor, no somos fundamentalistas de la innovación pero sí nos preguntamos: qué futuro para las escuelas?
-FL:- Empezaste mencionando una serie de líneas de investigación ¿Qué otras ven?
-MN:- Otro escenario cada vez más fuerte es el de la estandarización de la educación. Ese es un escenario muy importante y un viraje muy fuerte de los organismos internacionales que en los años 80 y 90 querían autonomía escolar y ahora quieren estandarización. Descubrieron ese camino en la potencia que tienen las evaluaciones estandarizadas, por ejemplo las pruebas PISA. Ya hay algunas experiencias y entendemos que es probable que en 20 años haya sistemas de estandarización y evaluación en tiempo real en muchas escuelas de un mismo país o de muchos países al mismo tiempo. Es decir que no se trataría de una prueba tipo Aprender cada año, alumnos trabajando con su computadora y evaluados en tiempo real, comparados y rankeados constantemente. De hecho es algo que ya se podría hacer, ya existen los recursos para hacerlo.
-FL:- Me hace acordar a la máquina de enseñar de Skinner.
-MN:- En realidad, hay empresas, hay corporaciones trasnacionales que están dedicadas a la preparación de materiales educativos en ese sentido que son mucho más sofisticados, más interesantes, y hasta más divertidos que la máquina de Skinner, pero que tienden a cierto nivel importante de estandarización, no tan homogeneizantes como la máquina de Skinner. Lo más importante es que con ellos se puede evaluar en tiempo real, es decir que no hace falta esperar una evaluación al final del año (o cada dos o tres años), sino que la evaluación, la medición y la comparación en términos de datos puede estar disponible todo el tiempo, lo que implica un cambio radical para la autonomía de los educadores y las escuelas que serán apenas una terminal telemática en tiempo real.
-FL:- Comparar con una escuela de otro país, por ejemplo.
-MN:- Si, de un país o de distintos países. Una red de escuelas que son terminales de un proceso de aprendizaje evaluable en tiempo real.
-FL:- ¿Y las líneas de contenidos y de capacidades a evaluar y a formar sobre qué se centrarían prioritariamente?
-MN:- En esta prospectiva, si indagamos un poco en este escenario futuro, los organismos supranacionales van ganando cada vez más peso.
-FL:- ¿Como por ejemplo la OCDE o UNESCO?
-MN:- Sí, por ejemplo la OCDE va ganando protagonismo en términos curriculares y de evaluación por sobre los ministerios de educación nacionales. Eso ya, de hecho está pasando. No en la Argentina, porque en la Argentina, por suerte o por desgracia, no participamos de eso, de hecho nos descalificaron de las pruebas PISA. Pero en muchos países del mundo cuando aparecen los resultados de las pruebas PISA renuncian ministros de educación, y cambian planes educativos. El director de educación de PISA Andreas Schleicher, es un economista o alemán, que se va convirtiendo en una especie de «Ministro de educación del mundo».
En este escenario, que es un escenario posible pero no seguro, habría una ganancia por parte de una lógica trasnacional y la posibilidad de estandarización y evaluación en tiempo real. Los pansophianos pensamos que esto tiene un problema, un perjuicio, desde el punto de vista de la autonomía y el autogobierno, es decir, que eso podría promover que el ideal pansóphico no esté disponible para todos. Eso en nuestra opinión es algo para lo cual hay que buscar alternativas.
-FL:- ¿El camino de las pruebas estandarizadas puede llevar a una forma de homogeneización?
-MN:- No solo eso, sino que al estandarizar y evaluar en tiempo es posible segmentar de una manera mucho más focalizada y precisa, es posible usar los datos para diferenciar y estratificar
-FL:- ¿Eso no podría ser positivo?
-MN:- Depende como se use podría ser muy negativo.
-FL:- ¿Pero la definición de cómo usarlo no dependería entonces del gobierno autónomo de cada país o provincia?
-MN:- El punto es si en este escenario futuro los estados se debilitan frente a la preponderancia del orden global.
-FL:- ¿Cómo ves que estos temas y desde esta perspectiva pansophiana se pueda incidir en la formación docente? Es decir, en docentes que se están formando en institutos de formación docente en Argentina.
-MN:- En principio nosotros tratamos de pensar las posibilidades de escenarios futuros pansophianos. Es decir, que estén dominados por el criterio de autonomía y de todos los saberes a todos. Eso para nosotros es muy importante. Respecto de la formación docente hay un tema muy importante que es que nosotros formamos parte de una escolarización en crisis y la mayoría de los educadores, sobre todo de países como los nuestros (no en Finlandia), y sobre todo los educadores llamados «críticos» sabemos que esto es así. Sabemos que hay una crisis, pero en la formación docente no actuamos en consecuencia. ¿Qué significa eso? Que muchas veces ordenamos el aspecto formativo de los futuros docentes como si esta crisis fuese una anormalidad y no como si fuese la regla que es. Entonces las herramientas que se brindan son herramientas para actuar en situaciones de una supuesta normalidad que no es, o a lo sumo para intervenir en situaciones de conflicto cuando en realidad la regla es el conflicto.
Un punto central es el concepto de asimetría. La pedagogía moderna está basada en una idea asimétrica de que el que enseña y el que aprende son otros, no son iguales. En la medida de la ruptura de esta asimetría por una crisis de la autoridad, y por la crisis de la escolarización, el que enseña y el que aprende se tornan equivalentes y eso genera conflictos. Un gran desafío en la formación docente es cómo se aprende a construir asimetrías que, a diferencia de las asimetrías tradicionales que eran legítimas una vez y para siempre, son asimetrías contingentes. ¿Qué significa asimetrías contingentes? Que los docentes ahora no tenemos legitimidad de origen. No es que porque nosotros somos docentes vamos a poder enseñar lo que creemos que tenemos que enseñar, sino que la autoridad es de ejercicio, la tenemos que construir. La construcción de esa autoridad, de esa asimetría hay que buscarla, cazarla, encontrarla construirla. Es muy difícil, no siempre se da y me parece que un gran avance en la formación docente entender que no es fácil educar en la actualidad.
-FL:- De todos los posibles escenarios futuros que planteaste ninguno está centrado en esa cuestión, que es una cuestión vincular, salvo el proyecto COOL que planteaba la posibilidad de la educación online.
-MN:- Es más que una cuestión vincular, es un cambio en las relaciones sociales e intergeneracionales.
-FL:- ¿Dentro del aula?
-MN:- En la sociedad.
-FL:- ¿En la sociedad en general?
-MN:- Sí. Hay un cambio que ya lo estamos viviendo en las relaciones intergeneracionales. Ese cambio supone una crisis del lugar del adulto como lugar legítimo del saber, ese es uno de los fundamentos de los cuestionamientos de la crisis de la escolarización.
-FL:- En la escuela secundaria se ve claramente.
-MN:- En todos lados se ve. En la primaria, en el jardín de infantes, y en la escuela secundaria es crítico. Es una condición de nuestra cultura. La nuestra es una cultura de carácter pre figurativo
-FL:- ¿Cuando decís “nuestra cultura” te referís a la cultura en nuestra sociedad?
-MN:- En el mundo donde hay democracia, mercado y Google. En esos contextos se procesa muestra cultura pre figurativa en donde la experiencia tiene poco sentido y utilidad, y los adulto se corren permanentemente el riesgo de la obsolescencia. La idea de que los grandes forman a los chicos es una idea continuamente revisable y eso le produjo un daño irreparable a la escolarización, por lo que es una de las bases de la crisis. A muchos de los problemas que nosotros vemos en todo el mundo, de violencia escolar, de bullying, le queremos encontrar raíces psicológicas, psicoanalíticas, psiquiátricas, neurocientíficas, sociológicas y la raíztiene que ver con este cambio de las relaciones intergeneracionales. La escuela, la institución escolar sigue siendo una tecnología del siglo XVII que funciona en base a combustible adulto y la cultura en la que vivimos en la que está inserta esa escuela ya no funciona en base a combustible adulto. Eso genera un choque que muchas veces es irreparable, y otras veces no.
-FL:- ¿Otro factor no podría ser también que la educación tradicional de alguna manera deja de lado, salvo la educación técnica o algunas ramas de educación artística, una formación de índole más experiencial, de trabajar sobre experimentos, sea por ejemplo con robótica, electrónica, biología, y arte. Me refiero a una experiencia en la cual en el propio hacer se aprende entre pares y luego se puede conceptualizar.
-MN:- Sí. Uno de los escenarios hipotéticos es el esfuerzo que hacen muchísimos educadores, y probablemente también algunos de nosotros, por mejorar el formato de las escuelas actuales para hacerlas más atractivas y más interesantes. Hay muchas respuestas. Una es la que vos señalás. Hay muchas otras, que son las que habitualmente se mencionan como “innovadoras”. Nosotros creemos que ese es un gran trabajo y que puede llegar a dar resultado, pero como hay mucha gente que ya lo hace nosotros nos dedicamos a ver lo que está por fuera de los bordes de lo escolar. Los pansophianos transgredimos los límites de lo pedagógicamente pensado
-FL:- ¿Pero no se vincula de alguna manera con algunas de las líneas que están planteando ustedes, por ejemplo en el aspecto de la búsqueda del cambio del formato?
-MN:- No, porque no cambia el formato. Ese es el punto, no disrumpe, es un esfuerzo por maximizar el potencial de la tecnología llamada escuela. Es sacarle el jugo hasta la última gota.
-FL:- ¿No puede ser una línea justamente para habilitar una disrupción?
-MN:- Es probable que eso genere alguna otra cosa, pero no lo sabemos. De todas maneras, sobre eso es lo que más se investiga. Nosotros no lo hacemos porque ya hay cantidad de libros l que describen experiencias que muestran mejoras, y eso está muy bien. En Pansophia Project le damos un gran valor a ese trabajo, pero como hay colegas que lo hacen entonces lo que planteamos es ver qué es lo que está afuera de esos límites, lo que hasta ahora no se ha pensado.
-FL:- Lo planteo porque si uno recorre espacios formativos, sean online o presenciales por fuera de escuela, el aprendizaje entre pares está muy presente.
-MN:- Casi cualquier cosa que quieras aprender está en YouTube.
Desde cómo cambiar el cuerito de una canilla (aunque ya no tienen cuerito), hasta cuestiones de algebra o de trigonometría. Y hay cursos on line voluntarios y gratuitos incluso de alto nivel académico Eso es algo que ya fue pensado en los años 70 por Iván Illich que fue un teólogo y un educador muy importante, ya fallecido. Si bien acabamos de publicar un paper sobre su propuesta de desescolarizar la sociedad, nosotros no estamos proponiendo esto, lo que hacemos es ver perspectivas posibles, no es que nosotros proponemos una u otra. Lo que sí proponemos son modelos pansophianos para actuar ahora proyectando el futuro.
Algunas de las predicciones de Illich existen, como por ejemplo la de crear redes de aprendizaje por interés donde la gente voluntariamente enseña y aprende. En ese momento, que fue en 1973, lo criticaban por derecha y por izquierda. Una de las críticas que le hacían era que que eso no se podía hacer porque, mayoritariamente, en los sectores sociales de menores recursos habría muchas dificultades para que se reuniesen el que enseña y el que aprende. Ese problema Internet lo resolvió. Por eso digo, hay muchas predicciones, como por ejemplo las de Isaac Asimov en 1986 en la entrevista que le hizo Bill Moyers, cuando recién empezaba a difundirse la PC e internet no era para nada para el gran público. Asimov allí dijo que estaba a favor de una computadora para cada alumno, mientras el entrevistador se sorprendía como uno se puede sorprender al escuchar lo de los nanobots implantados en la corteza cerebral. Asimov le dijo que tal vez ese acceso a una computadora no sería para todos, pero que en cierto tiempo eso iba a existir y se iba a poder hacer. También allí dio un ejemplo sobre los países que no tienen agua potable, y dijo que probablemente en esos países que no había (ni hay) agua potable sería más difícil que hubiesen computadoras para cada alumno. En realidad la predicción fue correcta solo por una cosa, en los países donde no hay agua potable hay computadoras para cada alumno.
-FL:- Y teléfonos celulares
-MN:- Conectados a la red. Esa entrevista fue en 1986, hace 30 años.
Me parece que hay que atreverse a imaginar muchas de estas cosas porque los que nos antecedieron, en varios casos, lo habían planteado, por lo que creo que hay que seguir indagando en esta línea.
-FL:- ¿Cómo ven entonces la incidencia en las grandes empresas tecnológicas? Ya que están investigando justamente en líneas que tienen que ver con el aprendizaje, con cómo se aprende, desde inteligencia artificial hasta implantes cerebrales, siendo que tienen una capacidad económica enorme para sostener y profundizar esas líneas de investigación y de alguna manera también operan como organismos supranacionales. A la vez que pueden llegar a cualquier chico solo en su casa, en su habitación.
-MN:- Es un gran tema. Hay varias cosas que planteaste, una es el tema de los injertos, otro la inteligencia artificial y otro más son las grandes Son todas distintas. Empiezo por la inteligencia artificial. Allí, al igual que para los injertos, el gran problema es quien gobierna eso. Quién produce el algoritmo o el injerto.
-FL:- Hoy ya es posible tomar la decisión individual de injertarse un chip. De hecho hasta se lo puede comprar y hacer uno mismo.
-MN:- Sí. Yo puedo decidir injertarme un chip, pero yo no defino que tiene el chip adentro.
-FL:- Es un tema que tampoco se debate.
-MN:- Exactamente, por eso el gran problema pansophiano es la posibilidad del autogobierno. Una posibilidad lúcida, consciente y reflexiva de autogobierno, lo cual, es un autogobierno distinto al autogobierno kantiano del siglo XVIII, pero finalmente va en un sentido de la autonomía personal y colectiva sobre el gobierno de uno mismo y de la sociedad. Contraria a la lógica pansophiana está la visión transhumanista. El transhumanismo es bastante conocido por la idea de poder extender la vida en las computadoras, extender efectivamente la vida y controlar genéticamente el organismo humano a fin de postergar la muerte lo más posible. Esa parte de la viabilidad transhumanista a nosotros no nos preocupa tanto. Sí nos preocupa la lógica transhumanista de que cualquier forma de injerto o de inteligencia artificial necesariamente es superior a las decisiones personales que tomamos, y que la decisión personal del implante está por encima de la decisión de qué es lo que tiene el chip que te estás implantando. Eso es un problema moral, pero también es un problema tecnológico y finalmente político,
Y aquí entramos en la tercer parte de tu comentario «Quién controla todo eso?» Efectivamente hay corporaciones. Las corporaciones tampoco son monolíticas, tienen sectores internos en pugna, establecen conflictos con gobiernos, con personas y con otras corporaciones. Es un panorama más rico y complejo que la idea fordista de una corporación que domina todo. .
Nosotros pensamos que la idea transhumanista de que cualquier forma de componente cyborg en nuestro cuerpo es positiva, es una visión perjudicial. El componente cyborg puede ser el propio celular, que es un cyborg externo, o directamente un injerto o una forma cyborg de influencia que se puede dar por medio de la inteligencia artificial. Es decir, es perjudicial todo control por parte de otros de aquello que te es dado comprender en función de tus gustos, tus intereses, tu identidad, etc.
-FL:- De alguna manera estamos hablando de formas de configuración de aspectos del ser humano.
-MN:- Por supuesto, es la forma de seteo de la vida digital, exactamente.
-FL:- Pero eso ya es una introyección de esa vida digital en el organismo.
-MN:-Hasta ahora uno finalmente decidía prender o apagar la computadora, desconectarse. Eso es cada vez más difícil.
-FL:- Culturalmente en algunas sociedades está mas naturalizada la dependencia y el no apagado si se quiere del Smartphone. Está más introyectado por más que sea un dispositivo externo.
-MN:- Sí. Exactamente. Está introyectado en hábitos que tienen que ver con desde salir a correr hasta con qué vas a consumir, si vas a ir al cine o si sabes por Tinder que hay alguien que está cerca para poder conectar. A eso se suman las funciones como la geolocalización, el big data a través de la que otros pueden relacionar todos los aspectos de tu vida. Esto es algo que ya pasa en la Argentina, e incluso pasa a nivel de gobierno.
-FL:- En esta línea el injerto tecnológico en el organismo es un paso más allá en la posibilidad de estar todo el tiempo conectado. Casi podríamos decir en la imposibilidad de apagar “la computadora”
-MN:- La idea de apagado es cada vez más lejana. Al contrario del apagado el chip o los nanobots están cada vez más adentro, eso plantea infinitos n de problemas educacionales, aún con el chip fuera del cuerpo, en el celular, como pasa ahora.
-FL:- Que son morales inicialmente.
-MN:- Son morales, pero son tecnológicos en términos de lo que llamamos tecnología – escuela. Es decir, respecto a cómo se va a disponer la transmisión de conocimiento. Aquí la idea de transmisión intergeneracional del viejo Durkheim, la idea escolar de que los grandes les enseñen a los chicos está pulverizada.
-FL:- Si pensamos en un/a docente que está leyendo está entrevista, que también lee cierta información, textos, autores y publicaciones sobre estas temáticas, que las tiene presentes, pero que también da clases y se encuentra con otras problemáticas puede que le sea muy desafiante empezar a hacer una puesta en común sobre cómo esos dos escenarios conectan.
-MN:- Esos dos escenarios se conectan porque estamos planteando los escenarios futuros desde ahora. Es decir, no tienen como no conectarse. Esto no es ciencia ficción.
El problema es cómo establecemos nuevas relaciones sociales en la educación, y si es posible cómo transgredimos los límites de lo que pensamos en términos de tecnología escolar.
-FL:- Volvemos al tema de las relaciones humanas.
-MN:- Por eso en relación a lo que mencionaste antes no sé si estoy tan de acuerdo con que sea un problema de vínculos en un sentido psicológico o psicosocial. Son relaciones sociales de la educación.
-FL:- ¿Cómo se accede a la información de las líneas de investigación sobre biotecnología, inteligencia artificial y nanobots que mencionaste? Ese tipo de investigaciones llevadas adelante por grandes corporaciones no suelen ser completamente abiertas en cuanto a resultados obtenidos.
-MN:- Para ello establecemos vínculos con colegas de otras disciplinas; como por ejemplo de la bioquímica, la neurociencia e ingenieros.
El problema es cómo uno aprende a ser autónomo. Ese es el punto. Para ser autónomo tenés que ser capaz de conocer tus propios límites y de procesar individual y colectivamente la información que se te está proporcionando, como así también de aprender a buscarla. Pero ese es un postulado del siglo XVII, no tiene nada nuevo. Lo que es nuevo es el hipertexto, es la complejidad, el algoritmo de inteligencia artificial Ese es el problema.
Y para ese problema nuevo también necesitamos nuevos lenguajes que incluyan pero superen la escritura académica y nos permitan activar lo concreto. Por eso nuestro video sobre el futuro de las escuelas
Entrevista Para Fundación Lúminis: Gabriel Latorre
- Autor: Gabriel Latorre
- Editorial: Fundación Lúminis
- Año: 2017