La Argentina plurilingüe
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En Argentina, la “cuestión de la lengua” tiene una larga tradición de
debate entre conservacionistas, puristas que al sacralizar la lengua,
pretendían mantenerla sin cambios, y progresistas, partidarios de aceptar
la variación y la mixtura, sobre todo tratándose de un territorio de inmigración
al que han acudido poblaciones europeas, mayoritariamente
con bajo nivel de escolarización. Asimismo, este es el molde que, desde la
década del cincuenta en adelante, se viene repitiendo, pero con migrantes
provenientes de países limítrofes y, desde los ochenta y noventa, se ha
renovado con grupos de lejanos países asiáticos, como China y Corea.
En Argentina, la “cuestión de la lengua” tiene una larga tradición de
debate entre conservacionistas, puristas que al sacralizar la lengua,
pretendían mantenerla sin cambios, y progresistas, partidarios de aceptar
la variación y la mixtura, sobre todo tratándose de un territorio de inmigración
al que han acudido poblaciones europeas, mayoritariamente
con bajo nivel de escolarización. Asimismo, este es el molde que, desde la
década del cincuenta en adelante, se viene repitiendo, pero con migrantes
provenientes de países limítrofes y, desde los ochenta y noventa, se ha
renovado con grupos de lejanos países asiáticos, como China y Corea.